¿Te gustaría prepararte para vivir más plena y conscientemente el Adviento?
La Iglesia, encargada como está por el mismo Dios de santificarnos, tiene establecida en su Ciclo litúrgico un método de santidad cuyo fin hacer nuestras almas semejantes a la de Jesús, ya que el Padre nos tiene “predestinados” a ser conformes a la imagen de su Hijo” (Rom. 8, 29).
Por eso cada año la liturgia celebra los diferentes aniversarios de los sucesos principales de la vida del Salvador, contemplando vivir las virtudes que el Jesús el Maestro practicó: de manera que sigamos siempre practicando más de sus saludables efectos. Cada tiempo litúrgico representa una nueva fase de la vida de Jesús y nos trae consigo gracias especiales. Importa, pues, conocer cuál sea el espíritu peculiar que a esos Tiempos caracteriza y abrigar siempre en nuestra alma las disposiciones debidas, si queremos aprovecharnos de la eficacia que les es propia.
Muy atinada la invitación, en nuestro itinerario de vida cristiana es necesario caminar acompañados de la Iglesia, somos cuerpo místico de Jesús y vivir el tiempo litúrgico nos hace crecer en identidad y compromiso. Muchas gracias por la invitación.
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